Capítulo 11.
POV Xavier.
Mi padre y yo estábamos llenos de aceite. Es lo que tenía este oficio. Hacía ya un par de horas que había dejado a Allison en el estudio. Suponía que me llamaría si necesitaba que la recogiera pero, cuando la vi bajarse de una moto que acababa de aparcar delante de su casa, vi que alguien la había traído. Se dieron un abrazo. Apreté la llave inglesa que tenía en la mano y mi mandíbula se tensó. Más me valía no quitarle el ojo a ese. No me daba buena espina.
-¡Xavier! Ven un momento.-Allison se había dado cuenta de que estaba allí. Me acerqué sin muchas ganas a ellos.
-Soy Lucas.-Me tendió la mano. Se la estreché con fuerza y él me devolvió el mismo apretón.
-Xavier, como ya sabrás.-Dije seco.
-Lucas y yo nos conocemos desde que éramos pequeños, somos grandes amigos. Me ha traído él. Le encontré dando una vuelta cerca del estudio.-Me explicó.
-Ajá.-Asentí no muy convencido.
-Creo que me tengo que ir chicos. Ya nos vemos.-Se despidió de nosotros montándose en la moto.
Una vez se marchó, mi postura se relajó. Miré a Allison y vi que me miraba con el ceño fruncido.
-¿Qué ha pasado aquí?
-Nada. Solo he conocido a tu amigo.-Me encogí de hombros.
-¿Estabas celoso?-Enrolló sus brazos alrededor de mi cuello.
-¿Yo, celoso? Que va.-Y después de varias horas sin hacerlo, la besé.
POV Allison.
-Allison, si no te estás quieta no puedo hacer esto.-Volvió a repetirme.
-Perdona.-Suspiré inquieta y a la vez emocionada.
Xavier me había propuesto hacerme un retrato. Hacía ya bastante tiempo que llevaba quieta en la parte trasera de su furgoneta y me estaba dando un calambre en la pierna de no moverme. Sin remediarlo, tuve que estirarla y acabé moviéndome.
-Ais.-Dejó el lápiz a un lado y me miró con las cejas levantadas.
-Creo que no vas a conseguir que me esté quieta.
-Yo también lo creo. Aunque a lo mejor puedo terminarlo con lo que tengo.-Cerró el cuaderno y saltó fuera de su furgoneta de una forma muy ágil. Se cruzó de brazos y esperó a que me uniera a él.
-¿Y bien?-Me coloqué a su lado.
-Llevas todo el rato inquieta, algo querrás hacer, ¿no? Estoy a tu disposición.
-¿De verdad?-La verdad que me apetecía bastante hacer cualquier locura.
-Sí pero, sin fines maléficos, que nos conocemos.-Me advirtió aguantándose una carcajada.
Empecé a correr hacia los árboles. No tenía un plan, no tenía rumbo, no tenía ninguna idea de lo que hacer. Solo quería vivir el momento. Saltar, correr, gritar, lo que hiciera falta. Me sentí bien, ¡qué digo bien! Genial. Xavier me alcanzó y me hizo un gesto como para que lo alcanzara. A los pocos segundos me llevaba bastante ventaja pero, me solté la melena y corrí todo lo que pude. Llegamos a unas grandes piedras, cerca del camino que tomamos para ir al lago. Xavier se apoyó en una y respiró profundamente. Yo seguí dando un par de vueltas más antes de parar.
-Me vas a matar. Estoy mayor para esto.-Dijo en broma mientras se sentaba en una de las rocas bajas que había.
Subí a su lado y le puse los brazos alrededor de su cuello apoyando la cabeza en su hombro. Cerré los ojos y me concentré en sentir cada ápice de su cuerpo junto al mío. Su mano en mi cuello, acariciándome suavemente. Su espalda en mi pecho, su nariz en mi mejilla… Empecé a producir demasiada saliva, iba a decir algo, algo que me moría por expresar, soltarlo a los 4 vientos, y me ponía nerviosa a la vez. Acerqué mi boca a su oreja y abrí los ojos para ver su reacción.
-Xavier…-Un leve sonido que hizo me dejó ver que me estaba prestando atención.-Te quiero, ¿vale?
El silencio nos envolvió. Me preocupaba haberme precipitado al decir aquellas palabras. Puede que no estuviera preparado para oírlas o ser consciente de lo que significaba pero entonces, se giró. Vi la sonrisa más enorme en su casa y cómo le centelleaban los ojos. Me pasó la mano por el pelo con delicadeza, aproximó sus labios a los míos, y perdí mi sentido común.
-Yo también te quiero Allison Moore.-Sus palabras resonaron en mi cabeza durante segundos después.
-No sé si creerte.
-¿No me crees?-Me encogí de hombros retándole mientras me mordía el labio reprimiendo una sonrisa.-Te lo demostraré. Si no me crees después de esto, me suicidaré, te aviso.
Subió las rocas hasta llegar a la más alta. Le miré sin saber lo que iba a hacer. Retrocedí varios pasos para poder verle mejor.
-¿Qué haces? ¿Estás loco? ¡Baja de ahí!-Le apremié.
-No hasta que diga algo.
Se acercó al borde de la roca puso sus manos alrededor de la boca y…
-¡Quiero a Allison Moore! ¿Me oís? ¡La quiero!-Gritó con todas sus fuerzas. Un leve eco me devolvió aquellas palabras que tanto me habían llenado.
Una vez hecho, empezó a descender las rocas y cuando hubo llegado al suelo me abalancé sobre él. Dio varias vueltas conmigo en el aire y luego me dejó con cuidado con los pies en la tierra. Volvía a notar mis ojos enrojecidos, a punto de colmarse de lágrimas.
-¿Suficientemente creíble para ti?-Susurró antes de darme un beso en el cuello que me hizo estremecer.